Aventuras Interraileras (Berlin)

Hoy en aventuras interraileras voy a hablar de nuestros 4 días que estuvimos en Berlin.

Día 1 en Berlín (6º Día del Interrail)

El 6º día de Interrail fuimos a Hannover, y como era caro quedarse a dormir decidimos ir por la tarde a nuestro siguiente destino, Berlín. Nos acordamos rápidamente de que Fernando Ruiz estaba en un curso en Berlin, y que nos dijo que nos invitaría a su casa, y nosotros como grande tacaños le llamamos para ver que dónde andaba. El Oso empezó a hablar con él pero a los rotos del tren les parecía que hablaba demasiado alto, así que terminé hablando yo. Cuando llegamos a Berlin, Fernando Ruiz tenía el móvil apagado!!!. Estuvimos dándo un montón de vueltas, llamamos mil vces desde el móvil y desde la cabina y no había manera. Se estaba haciendo de noche y no sabiamos a dónde ir. Cuando decidimos ir a un albergue nos llamó Fernando, que se había quedado sin batería y tuvo que ir a su casa (a casi 1 hora de la estación, en metro), nos dijo que nos montáramos en el metro e hicieramos transbordo en otro hasta llegar a su parada. Apuntamos sus indicaciones como pudimos, y después de mucho preguntar llegamos al metro. En la estación d metro el Oso vio una maquina que ponía un a luz roja y un timbre para llamar, y el pos llamó y de repente salta una voz gritando en alemán, resulta que le había dado a un botón de emergencia que se le da en caso de que alguien se caiga a la vía o algo de eso. Por fin nos encontramos con Fernando y nos llevó a su casa, dónde nos acogió esa noche y nos dio de cenar y cervezas. Nos llevamos unos botellines para el camino y nos lo estuvimos bebiendo en el metro, en plan bohemio.

Fuimos a una casa ocupa muy bohemia y muy chula, que estaba llena y había gente de todo tipo. En la parte de abajo había un bar, el Zapata, dónde había música cubana y un ambientazo, gente de todo tipo. Tenía como una terraza dónde había caravanas dónde vendían cervezas, quizás el sitio más bohemio que hemos ido en todo el viaje. En el zapata había uno al lao que nos quería meter mano a todos. Fernando Ruiz estuvo echandole fichas a una sudafricana, y yo esperaba ave si teníamos suerte y nos invitaba al mundial de 2010. Después fuimos a una discoteca pero había que pagar 10€ y pasamos, cenamos otra vez y nos fuimos.A la vuelta en el metro había unos sordomudos que se nos estuvieron insinuando y por poco nos violan.

Día 2 en Berlín (7º Día del Interrail)

Ya se nos acabó el chollo de dormir gratis, y tuvimos que buscar un Hostel. Nos llevábamos toda la mañana buscando, pero no había manera. Mientras buscábamos un albergue, Fernando y yo nos dimos la vuelta y no veíamos al Oso, había desaparecido, como si la tierra se lo hubiera tragado, le llamé al móvil no me lo cogía, al rato le vimos salir de una tienda, que se le había representado a él comprar algo para comer porque tenía hambre. Al final encontramos el AO, un gran albergue, de lo mejorcito de los que hemos estado, que nos costaba 10€ la noche, y además teníamos al lado el supermercado Plus Superdeskuengtten, con sus chiquisijanders.

Estuvimos viendo un poco la ciudad, de los que destaco el pirulí ese que no se como se llama y el museo de Pergamo.

Cómo estábamos cansados, cenamos y nos fuimos al albergue. No nos apetecía acostarnos temprano y fuimos a una terracita muy chula que tenía el albergue a tomarnos unas cervecitas. Allí vimos a unos vascos que les dijimos que se sentaran con nosotros y estuvimos hablando con ellos (Esto maracaría un antes y un después en el viaje porque los siguientes días cada vez que hablábamos imitabamos el acento vasco, y aentos d otra gente que conocimos es lo que tiene estar 25 días solo con otra persona, que te hace tener personalidad múltiple). Nos fuimos con ellos a una discoteca, en la que nos registraron al entrar como si fueramos unos delincuentes. Había muy buen ambiente en la discoteca, estuvimos un rato y nos fuímos para el Hostel.

Día 3 en Berlín (8º Día del Interrail)

El Oso y yo fuimos al Tour gratuito, que es un tour qu te lleva por la ciudad y que tu le pagas lo que quieras, incluso se peude no pagar nada, aunque eso no lo hace casi nadie. Nosotros cuando quedaba poco para terminar el tour nos fuímos para no pagar (En Amsterdam tampoco pagamos, esque estamos en crisis)

Por la tarde quedamos con Fernando y estuvimos conociendo un poco más Berlin, estuvimos en un parque enorme dónde subimos a una torre grande. Fuimos otra vez a la casa ocupa y nos tomamaos unas cuantas cervezas. Por la noche en la terreza del albergue volvimos a estar con los Vascos, estuvimos hablando otra vez, pero esta vez eran mucho más sosos. Entonces se nos acercó un hombre a pedirnos fuego, al final le dijimos que se sentase. Era un italiano llamado Marco, que era catador de vinos, director de cine, actor de reparto, y miles de cosas. Nos intentó vender la película que había echo por 25€, cuando hemos visto el trailer nos hemos dado cuenta que los cortos que yo hago le dan 3.000 vueltas.

www.lacasadepiedra.org

Día 4 en Berlín (9º Día del Interrail)

Nos querían cobrar 18€ por la tercera noche, así que dijimos que no y nos fuimos abuscar otro albergue, nos llevabamos más de 3 horas buscando (sin exagerar) albergue, la tensión se respiraba en el ambiente, al final decidimos volver al albergue, pagamos el dinero y nos acostamos la siesta directamente. Después de toda una mañana perdida, nos fuimos por nuestro lado a conocer algo más de Berlin, Fernando Ruiz no dio señales de vida ese día. Por la tarde seguimos viendo un montón de cosas más, y conseguimos entrar gratis en el Alter Museum, dónde está el busto de Nefertiti.

Por la noche nos tomamos nuestras cervecitas de rigor, nuestro amigos vascos ya no estaban, y nos las tomamos solos, divirtiendonos inventandonos el diálogo de una excursión que estaba en el hotel. Vimos a unos chavales que tenían en la mesa un montón de cervezas, que nos dijeron que eran sevillanos, eran los primeros sevillanos y únicos que nos encontramos en todo el viaje. Bajamos al bar que había en la recepción, y forzamos a que el camarero nos invitara a un chupito, estuvimos hablando con él, hasta que apareció nuestro amigo Marco. Estuvimos hablando con Marco, incluso llamó “inculto” al Oso por no saber ciertas cosas. Vinieron unos venezolanos que a Marco les parecería muy “lindos”, porque se fue a sentarse espontáneamente con ellos. Estuvo echandolo miraditas a uno de ellos, y por poco se lo come con los ojos. Los venezolanos iban para Italia, y Marco les dio su número para que le llamaran y se quedaran en su casa, de coña vamos. Allí estaban los sevillanos que resulta que uno de ellos conocía gente del Paula , como por ejempli a Leire, la cual cuando se lo contamos se cabreó un montón. El sevillano amigo de Leire nos contó sobré su interrail y nos dijo que se tiró auna puta en Amsterdam oy comió setas y tenía un enano al lado que le contaba chistes. Había también un tío muy loco alemán que chapurreaba levemente el español y que estaba como una cabra, ademas decia que los alemanes bebian mas que los españoles, y no paraba de repetir "Babaria", que pesao era. Al día siguiente nos levantamos tempranos y nos fuimos a Dresde.

Esto es grande rasgos las cosas que pasaron en Berlin, una ciudad a la que volveríamos con los ojos cerrados todas las veces que hiciera falta.